Los moluscos contagiosos en la piel son una infección viral que afecta principalmente a niños y adultos jóvenes. También es conocido como el “virus de las piscinas”, porque es un tipo de molusco típico de los niños que se causa en la piscina.
En cambio, en adultos la vía de transmisión es sexual.
Este tipo de infección vírica se caracteriza por la aparición de granitos blanquecinos de 2 a 6mm que no ocasionan molestias. Durante la infancia las lesiones se localizan preferentemente en extremidades y en la edad adulta en genitales, precisamente porque la vía de transmisión es sexual.
Es fácil de diagnosticar, pero debe de diferenciarse de las verrugas vulgares fundamentalmente. El tratamiento más sencillo consiste en curetar o rascar la lesión con una cucharilla.
Los exantemas víricos son erupciones generalizadas que aparecen bruscamente y afectan a cara, tronco y extremidades, normalmente a niños en edad escolar. Se suele acompañar de dolor de cabeza, fiebre, adenopatías y mal estado general.
Los exantemas clásicos de la infancia son debidos a rubeóla, sarampión, varicela, exantema súbito y eritema infeccioso o también llamado “quinta enfermedad”.
El tratamiento del exantema vírico consiste en aliviar los síntomas.
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